• El descubrimiento se hizo gracias al hallazgo de huesos de bacalao desecado de hace 1,200 años.

Kiel/Busdorf, 8 ago (dpa) – Los vikingos comerciaron en Europa central con pescado procedente de las islas noruegas de Lofoten muchos años antes de lo que se pensaba hasta ahora, según un nuevo estudio dirigido por la Universidad de Oslo y publicado por la revista “Proceedings” de la Academia Nacional de Ciencias estadounidense (PNAS).

El descubrimiento se hizo gracias al hallazgo de huesos de bacalao desecado de hace 1200 años en el asentamiento vikingo de Haithabu, al noroeste de la actual ciudad alemana de Kiel.

La sal como medio de conservación no estaba disponible en grandes cantidades en torno al año 800 DC, explicó el biólogo y coautor Jan Dierking, del Centro de Investigación Oceanográfica Geomar Helmholtz de Kiel.

“Pero el clima noruego era adecuado para desecar los pescados al aire”, indicó. Hasta ahora se pensaba que el comercio de pescado desecado había comenzado en el siglo XIII, en tiempos de la Liga Hanseática.

“Hemos demostrado, sin embargo, que empezó 500 años antes, con los vikingos”, dijo Dierking. Los comerciantes de la Liga llevaban registros del pescado como bien de intercambio, pero se desconocía a partir de cuándo habían comenzado los negocios entre Noruega y el norte de Alemania, en vista de que los vikingos nunca los reflejaron por escrito.

Los científicos utilizaron restos arqueológicos, entre ellos cinco huesos de pescado de Haithabu, y los sometieron a análisis genéticos. Finalmente compararon los resultados de los pescados de Haithabu y de otros asentamientos medievales con los peces actuales del Báltico oriental, de Öresund, en el mar del Norte, de las Lofoten y en el Ártico nororiental.

El inesperado resultado fue que el pescado que se comía en Haithabu procedía de las Lofoten, ubicadas a hasta 1.500 kilómetros de distancia, y no de los caladeros más cercanos del mar del Norte y del Báltico, según Dierking.

Los investigadores están seguros de que los restos no proceden de algún viaje concreto de los vikingos desde el norte, “porque son de distintas capas y épocas”, según Dierking. “Estos cinco huesos cubren una época de 250 años”. Cuatro de los cinco proceden de las Lofoten. “Eso demuestra que los vikingos pusieron en marcha el comercio que unió caladeros muy distantes de Europa entre sí”.