• Uno de los grandes del barroco español.
  • La Catedral Tapatía cuenta con uno de sus cuadros célebres.
  • Por Salvador Y. Maldonado Díaz

Sevilla, España. 13 de mayo de 2018.- Ya está a la vista del público un monumental mosaico con la imagen de la Virgen Inmaculada del pintor Bartolomé Esteban Murillo en la céntrica plaza del Duque de la Victoria en Sevilla, una de las ciudades más visitadas de España.

El inmenso cuadro hace parte de las iniciativas que desde finales del 2017 se vienen poniendo en marcha en esta ciudad de Andalucía para conmemorar el Año de Murillo con motivo de los 400 años del nacimiento del pintor sevillano, según información de la agencia Gaudium Press.

En el mural, que es un homenaje que El Corte Inglés ha dado al artista español, ha quedado nuevamente inmortalizada “La Colosal”, como se le conoce a esta obra dedicada a Nuestra Señora, cuya original se encuentra en el Museo de Bellas Artes de Sevilla.

El gran lienzo, con una dimensión de 364 metros cuadrados, es el resultado del proyecto “Pinta tu Murillo” promovido por la tienda española, con la coordinación de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla. El propósito fue reproducir de manera parcial esta obra extraordinaria de Murillo, e involucrar a los ciudadanos en las celebraciones por los 400 años de nacimiento del artista sevillano.

Para la realización del monumental mosaico, se utilizaron más de 17 mil piezas que los ciudadanos fueron pintando, para luego unir y darle forma reproduciendo la Inmaculada de Murillo a través de un programa informático que escaneó y sometió la imagen a un pixelado digital.

“La Colosal” es una de las obras maestras de Murillo que fue pintada hacia 1650. La pintura marcó un hito dentro del barroco español, ya que el pintor estableció un nuevo prototipo iconográfico para representar a la Madre de Dios.

Como destaca el Museo de Bellas Artes de Sevilla, para esta representación Murillo vistió a María con túnica blanca y manto azul, y utilizó composiciones que le dieron gran dinamismo, que se caracterizan por el fondo resplandeciente dorado y los ángeles que acompañan revoloteando a la Virgen.

Se le llama “La Colosal” por sus grandes proporciones. Fue pintada por encargo de los franciscanos, quienes desde la Edad Media fueron grandes defensores de la Inmaculada Concepción de María. En la imagen aparece Nuestra Señora con sus manos unidas, como orando, y dirigiendo su mirada hacia abajo, como contemplando.

El Año de Murillo fue inaugurado el 8 de diciembre de 2017 y se clausurará el próximo 8 de diciembre. Son varias las iniciativas que tiene lugar para recordar Esteban Bartolomé que actualmente tienen curso en Sevilla, entre ellas la muestra que la catedral de Sevilla ha dedicado al pintor, acogiendo varias de sus importantes obras y con el propósito de ofrecer una catequesis visual y textual sobre el concepto de la santidad.

La muestra incluye 16 obras firmadas por Bartolomé Esteban Murillo, 15 de las cuales son propiedad del Cabildo y una, “La Virgen entregando el rosario a Santo Domingo”, que hace parte de la pinacoteca del palacio del Arzobispado. También cuenta con 40 documentos relacionados con el pintor, entre ellos libros y grabados.

EL DATO

En la sacristía de la catedral de la Arquidiócesis de Guadalajara se tiene un cuadro de la Inmaculada de Murillo.

Esta obra ha tenido sus vicisitudes históricas, como el suceso de su ocultamiento por parte del Cabildo de la catedral durante el tiempo de la Revolución, cuando se escondió el cuadro de Murillo, y en su lugar colocó una copia que hizo José Reyes Durán, obra que fue robada por los constitucionalistas. Al pasar los sucesos y viendo que ya no había peligro, se volvió a colocar el cuadro de la Virgen en la sacristía de la catedral.

Murillo (1617-1682) fue contemporáneo de otro gran pintor sevillano: Diego Rodríguez de Silva y Velázquez (1599-1660), uno de los grandes monstruos de la pintura universal.