Por: José Javier Rodríguez Ochoa*

 

“Los productos se hacen en fábricas, pero las marcas son creadas en la mente”

Walter Landor.

Si deseas distinguirte de la competencia debes hacer las cosas de manera diferente, atraer a tus clientes y mejorar la percepción que ellos tienen de tu negocio o producto.

Una marca, según la legislación, es todo signo visible que se usa para distinguir e individualizar un producto o servicio  de otros de su misma clase o especie. Su función principal es la de servir como elemento de identificación de los diversos productos y servicios que se ofrecen y se prestan en el mercado.

Adoptar una marca te ayudará a ser recordado por la misma, después de todo resulta más sencillo para las personas tener en mente una palabra que todo un concepto.

Cuando necesitas limpiar tu nariz piensas en Kleenex, no en pañuelos desechables o ¿acaso me equivoco?

Pues bien, la labor que realizas, cualquiera que ésta sea, para posicionar tu marca, es decir, hacerla reconocible para tu mercado; es una inversión sustanciosa, ya sea en tiempo o dinero independientemente del plan de mercadotecnia que hayas asumido por más básico que resulte.

Entonces no es recomendable dejar toda esa inversión en el limbo a merced de que cualquiera aproveche tu reputación y obtenga beneficios a tu costa.

No olvides que la marca a la larga puede resultar más valiosa que el propio negocio que realizas o también puede resultar indispensable para realizar el plan estratégico que te has trazado, tal vez tengas en mente aprovechar el modelo de franquicias, por ejemplo.

En este contexto resulta primordial proteger este activo intangible por medio de su registro ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, mejor conocido como IMPI.

Obtener un Título de Registro por su marca le da derecho a usarla en forma exclusiva en toda la República Mexicana. De esta manera nadie deberá usarla sin su autorización.

Si bien el trámite resulta sumamente sencillo y hasta cierto punto económico -los derechos de registro al día de hoy rondan los 2 mil quinientos pesos- es importante obtener el apoyo y orientación de asesores en el área.

Un asesor en estos temas le ayudará con aspectos básicos como el debido llenado del formato de solicitud y la revisión de la documentación que deberá acompañarse y otros tantos más complejos, como despejar dudas sobre los titulares que deberán o podrán figurar en el registro, efectuar una búsqueda de anterioridades y lo más importante, realizar una debida clasificación de la marca de acuerdo con el catálogo de clases internacional (Arreglo de Niza)

La búsqueda de anterioridades tiene como objetivo cerciorarse de que la marca que desea adoptarse no ha sido registrada por alguien más, lo que impediría solicitar su registro en términos generales, aunque  derivado de esta búsqueda también se podrá trazar la ruta que sería necesario seguir para lograr un registro exitoso a pesar de esa anterioridad.

La correcta clasificación de la marca es de suma importancia, pues con esta labor se logra el objetivo de cubrir todos los posibles productos y servicios que el solicitante desea comercializar bajo ese signo distintivo.

¿Estás interesado en registrar tu marca o algún otro signo distintivo? Contáctanos.

No lo olvides, si tienes alguna duda o requieres apoyo en estos temas ponte en contacto:  javier.rodriguez@rycc.com.mx

Se desempeña como consultor fiscal y de negocios

Es Contador Público Certificado y cuenta con el posgrado de Maestría en Impuestos