¿PROCRASTINAR YO?

NOSCE TE IPSUM Por: Dr. Josman Espinosa Gómez

Tienes una terea muy importante para mañana, que te dejaron hace 2 semanas, pero por alguna razón, no la has hecho; piensas que todavía tienes toda la tarde y la noche para ello y que cuando llegues a tu casa la harás rápido, pero llegas a comer, a ver tus redes sociales, a hablar con un amigo, vas a la tienda, ves algo tirado en tu cuarto y te pones a levantarlo, y cuando te das cuenta, es la media noche y no has empezado ni siquiera a ver de qué se trata ¿Te ha pasado? Se le llama procrastinar.

La procrastinación es la acción o el hábito de postergar actividades o situaciones que deben atenderse, sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes o agradables. El término se aplica en psicología para definir la sensación de ansiedad generada ante una tarea pendiente de concluir, y se ha convertido en un trastorno del comportamiento que a todos nos afecta en mayor o menor medida en alguna ocasión.

Sin embargo, la procrastinación es un problema de mala regulación y pésima organización del tiempo, provocando una actitud evasiva. Todo esto provoca en las personas que procrastinan una sensación de caos y de frustración debido a la acumulación de tareas pendientes, y por lo tanto, también produce sentimientos de insatisfacción, inseguridad, inferioridad y estancamiento, lo grave de esto, es que, como consecuencia de estas acciones, se va perdiendo la confianza en uno mismo y el respeto de los demás.

El psicólogo Willian Knaus nos dice que las autodudas, junto con la baja tolerancia a la tensión, son las raíces de las conductas de postergación y evitación. La autoduda es el reflejo de un proceso autodestructivo y ocurre cuando juzgamos nuestras habilidades como deficientes, devaluándonos a nosotros mismos, ya que estas autodudas nos orillan a conclusiones irracionales. De la misma forma que las autodudas, todo aquello que nos produce tensión o irritación en la vida diaria, hace que exageremos la importancia de estos hechos dándole una importancia negativa, por lo que vamos a intentar neutralizarlos a través de la evitación.

¿Y entonces qué hago para evitar procrastinar?

Existen muchas técnicas, pero te voy a recomendar la más práctica y sencilla, la que señala David Allen en su libro “Getting Things Done” y es: “Si toma menos de dos minutos, entonces hazlo ahora”, de la misma forma, cuando inicies un nuevo hábito, éste debe tomar menos de dos minutos en hacerse, si bien es cierto que tu mundo no cambiará en dos minutos, todas las metas pueden iniciar en ese tiempo o menos. La parte más importante de un nuevo hábito es iniciar –no sólo la primera vez, sino cada vez. No se trata de cómo lo hagas, sino de que empieces a hacerlo.

¿Quieres saber si eres un procrastinador? Te toma menos de dos minutos decidirlo, ¿quieres empezar? Checa este link: TEST DE PROCRASTINACIÓN https://www.psicoactiva.com/test/test-eres-un-procrastinador.htm

Procrastinar