• “La religión nunca debe ser una justificación para el odio y la violencia. No se puede librar ninguna guerra en nombre de la religión”.

El presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, advirtió hoy en su discurso de apertura de la décima Conferencia Mundial de Religiones para la Paz sobre los peligros que conlleva el uso de la religión con fines políticos.

“La religión nunca debe ser una justificación para el odio y la violencia. No se puede librar ninguna guerra en nombre de la religión“, aseguró Steinmeier en la ciudad de Lindau, junto al lago de Constanza, en el sur del país.

En lugar de ser una “razón para la discordia y la guerra”, las religiones deben actuar como “instrumentos de paz”, observó el presidente alemán.

“Desde su propias convicciones, las religiones deben sentirse llamadas a cooperar de forma enérgica en la realización de los objetivos de desarrollo de las Naciones Unidas”, señaló.

Se espera que unos 900 delegados de más de un centenar de países asistan a la reunión interreligiosa de la organización no gubernamental Religiones por la Paz (“Religions for Peace”), incluidos representantes religiosos, políticos y miembros de organizaciones internacionales.

Hasta el 23 de agosto trabajarán en la resolución de conflictos y en medidas de paz para prevenir la violencia. “Esta reunión es un signo de esperanza en un mundo turbulento”, indicó Heinrich Bedford-Strohm, presidente del consejo de la Iglesia protestante de Alemania.