• El cuerpo de Anis Amri, acusado de matar a 12 personas con su camión en Berlín es motivo de disputa entre dos ciudades italianas.

Las autoridades italianas están enfrentadas en una bizarra disputa por el coste de la conservación del cadáver de Anis Amri, el tunecino que mató a 12 personas con su camión en un mercado navideño en Berlín el pasado diciembre.

La localidad de Sesto San Giovanni, donde Amri fue abatido a tiros poco antes de Navidad, se niega a pagar a factura de la custodia del cadáver que le envió la cercana ciudad de Milán, donde se conservó el cuerpo hasta su traslado a Túnez a finales de junio, tras largas idas y venidas.

El alcalde de la localidad, Roberto Di Stefano, se niega a pagar los $2 mil 160.18 euros que le pide Milán, lo que considera una “exigencia vergonzosa y humillante”, y aseguró que el dinero de sus ciudadanos “nunca” se destinará a un terrorista, escribió en su cuenta de Facebook.

Di Stefano envió una queja al primer ministro italiano, Paolo Gentiloni, entre otros. En Italia la ley contempla que los costes de este tipo los asume un municipio si nadie se hace cargo del cadáver.

Tras perpetrar el atentado, Amri consiguió huir hasta Italia, donde un policía lo abatió en un control rutinario. Entre las 12 víctimas mortales del atentado de Berlín había una ciudadana italiana.