• Reclutadores y clientes revisan nuestras redes sociales y pueden “googlear” nuestro nombre para saber quiénes somos y qué compartimos

“Compartir memes en las redes sociales, donde también se maneja el perfil profesional o de la empresa, podría ser una práctica negativa, que aleja a clientes potenciales o a nuestro trabajo soñado”, explicó el Mtro. Rodolfo Hernández Jiménez, profesor base de la Escuela de Ciencias Comerciales y Comunicación del Decanato de Ciencias Sociales Económico y Administrativas de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), durante su conferencia “Branding Personal”, que impartió invitado por la Agencia de Comunicación y Marketing Enlaces Empresariales como parte de sus cursos sobre plataformas de creación de contenidos.

El académico señaló que en los últimos años las empresas, al momento de reclutar a sus nuevos colaboradores, revisan su presencia en redes sociales y páginas webs, ya que lo que postean en éstas habla mucho sobre cómo son en su vida diaria y expresa también sus costumbres y actitudes en el área profesional y laboral.

“Es por eso que debemos cuidar lo que publicamos. Incluso si son memes. Son divertidos, pero pueden hablar mal de nosotros. Se debe cuidar lo que compartimos hoy en nuestras redes sociales, lo que hacemos, lo que posteamos, nuestras opiniones, las fotos que ponemos, las cuales podrían perjudicarnos o apoyarnos en una entrevista de trabajo o con un cliente; los memes también entran en esa categoría”, dijo.

El académico remarcó que los reclutadores y clientes revisan nuestras redes sociales y pueden “googlear” nuestro nombre para saber quiénes somos, qué compartimos y por ello, se debe estar atento sobre lo que aparece de nosotros en internet “porque a veces aparecen ciertas fotos, memes o información que quizá no sea adecuada o no nos genere la imagen que a nosotros nos gustaría transmitir”, comentó.

El Mtro. Rodolfo Hernández Jiménez recomendó manejar dos tipos de perfiles: uno personal y otro profesional; los perfiles personales deben de tener cierta privacidad, donde sólo tengamos a un grupo de amigos, conocidos y familiares.

Mientras que en las redes o páginas profesionales se trata de construir nuestra imagen como individuos profesionales y lo que queremos transmitir a clientes y prospectos; lo anterior lo calificó como lo “más sano” y pidió no se mezclen estas dos vidas en un mismo perfil, una red o una página de internet.

“Este es un buen momento para pensar o replantearnos estos proyectos y metas; pongamos atención en nosotros y pongamos el tema del branding personal sobre la mesa, transformándonos y entendiendo que estamos haciendo de nosotros una marca; una vez reflexionado y tomada una decisión, debemos crear metas y hacer las adecuaciones más convenientes sobre nosotros mismos”, agregó.

El branding personal, aclaró el maestro, es pensar nosotros mismos como si fuéramos una marca, en especial como profesionistas, por lo tanto, tenemos una imagen que proteger y una reputación que cuidar.

El brandin personal es una serie de herramientas que nos ayudan a salir adelante en la vida tanto profesional como individual, éste habla de nosotros hacia los clientes, expresa nuestra identidad y características o elementos que se parecen a los que usamos para entender una marca.

“Muy pocas personas usan de manera adecuada el branding personal, de hecho, pocas personas lo utilizan y lo saben aplicar dentro de sus vidas. Debes generar una imagen o una percepción de ti mismo hacia otros. Esto engloba la imagen de la persona, cómo se viste, cómo se comporta, cómo interactúa con otros, también engloba, los temas del currículum, la experiencia y lo que otros dicen de ti”, concluyó.

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