• Analiza Cinvestav propiedades de la oxitocina, hormona de la leche materna, ante afectaciones vinculadas al estrés sicológico y nutricional de la madre durante la gestación

Zacatenco, Ciudad de México. 8 de noviembre de 2017.- Según la Estrategia Nacional de Lactancia Materna 2014-2018, es recomendable alimentar a los recién nacidos con leche materna de manera exclusiva hasta sus primeros seis meses de vida, y si posible, hasta después del año de edad como alimento complementario, ya que se han demostrado los beneficios de esta práctica ofrece tanto a los niños como a las madres.

De hecho, cada vez son más las evidencias científicas que vinculan la salud infantil y materna con la lactancia materna. En ese sentido, científicos del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) han aportado nuevas evidencias al analizar el vínculo de una hormona que juega un papel importante en la lactancia materna con la prevención de la hipertensión en el menor.

El análisis realizado en modelos animales fue elaborado por Froylán Vargas Martínez e Ismael Jiménez Estrada, adscritos al Departamento de Fisiología Biofísica y Neurociencias del Cinvestav, y busca saber si la oxitocina, una hormona peptídica esencial de la leche materna, tiene efectos protectores en el producto (el neonato) ante los efectos del estrés sicológico y/o nutricional al que están expuestas las madres durante la gestación.

“Es muy conocido el efecto nocivo que produce el estrés en las mujeres en gestación sobre la salud futura del producto. Esto es una consecuencia de afectaciones en el balance homeostático hormonal que eleva los niveles de hormonas vasoconstrictoras, tales como el cortisol (GCs), la angiotensina II y de la corticotropina. Esta última induce estados sicológicos de ansiedad, depresión e incluso suicidio”, mencionó Vargas Martínez, titular de la investigación.

En cambio, la oxitocina trabaja como una hormona vasorrelajadora a nivel del sistema cardiovascular, que junto con otra hormona conocida como factor natriurético arterial, ejerce una acción reguladora de la presión sanguínea y de relajación corporal. Además, la oxitocina provee la sensación de saciedad, de modo que los individuos con fallas en su producción tienden a ser obesos.

Al conocer esas características, los investigadores del Cinvestav analizan si la oxitocina tiene efectos protectores en el recién nacido, ya que los resultados obtenidos en el análisis con roedores sugieren que la hormona es muy importante en el desarrollo postnatal del neonato, al funcionar como hormona de desarrollo y neuroprotectora de órganos y tejidos que evita la acumulación nociva de los radicales oxidantes.

Cabe señalar que la oxitocina es una hormona que proviene de la glándula pituitaria de donde es liberada al torrente sanguíneo, y además, es sintetizada por la glándula mamaria para favorecer la liberación de la leche materna, funcionando como vasoconstrictora a este nivel.

A pesar de que desde hace más de 20 años se sabe que esa hormona es sintetizada por las tres capas protectoras del feto humano, hasta ahora no se habían estudiado sus funciones durante la gestación, por lo que la investigación que realizan desde hace tres años los científicos mexicanos resulta novedosa a nivel mundial.

De hecho, este estudio forma parte de un proyecto de investigación de larga duración que comprende la observación del desarrollo de los infantes prematuros durante varios años. Este se llevará a cabo en colaboración con especialistas del Hospital Infantil de México “Federico Gómez”, bajo la Dirección de los Servicios Especializados, donde los expertos del Cinvestav aportarán la información pertinente en cuanto a los mecanismos epigenéticos y bioquímicos involucrados en la acción de las hormonas de la leche materna en la salud de los bebes prematuros y normales.