La escritora Harper Lee, autora del clásico Matar a un ruiseñor, ha fallecido hoy a los 89 años en Alabama, en una residencia, The Meadows, en Monroeville. En un edificio pequeño de una planta vivió, protegida de sus fans, los últimos años. La noticia la adelantó el periódico Alabama proud  y la confirmó un funcionario municipal de la localidad donde vivía Lee. La autora de Matar a un ruiseñor —de la que se han vendido más de 30 millones de ejemplares— se prodigaba poco en público y más desde que sufrió un ictus en 2007. De ese silencio la sacó Ve y pon un centinela, la precuela de Matar a un ruiseñor, que se publicó el verano pasado, 55 años después de la edición de la primera parte.

La célebre Matar a un ruiseñor (1960), que recibió el Premio Pulitzer al año siguiente, cuenta tres años en la vida de Maycomb, el pueblo imaginario en el que Lee volcaba sus propios recuerdos, entre 1932 y 1935, a través de la mirada de Scout, una niña de seis años que vive con su hermano y su padre viudo, el abogado Atticus Finch. La novela entrelaza tres historias: la del descubrimiento del mundo por parte de tres niños, Scout; su hermano Jem y su amigo Dill; la de un vecino, Boo Radley, que vive recluido en su casa y da pie a todo tipo de fantasías por parte de los niños, y la del juicio a un negro del pueblo acusado de violar a una mujer blanca, cuya defensa asume Atticus.

Ve y pon un centinela describe la historia de Scout de mayor. En los años cincuenta vive en Nueva York, como Harper Lee en la misma época, y vuelve a Maycomb para ver a su padre. El regreso le obliga a afrontar y entender las actitudes de su padre ante una sociedad cambiante y su propio lugar en el pueblo de su infancia.

Nelle Harper Lee era la pequeña de los cuatro hijos de un editor de periódicos y abogado: uno de sus casos fue la defensa de dos negros acusados de asesinato. En aquella idílica infancia, su mejor amigo era un chaval llamado Truman Capote, posteriormente uno de los grandes cronistas del siglo XX, que inspiró el personaje de su amigo Dill en Matar un ruiseñor. De ahí que en las dos películas sobre Capote, Truman Capote e Historia de un crimen, Lee apareciera como secundaria: en la primera la encarnaba Catherine Keener, en la segunda, Sandra Bullock.