- El ganador, Hamilton, y su equipo volvieron a demostrar a Ferrari lo que todavía le falta a la Scuderia para regresar a lo más alto de la Fórmula 1.
- Por Christian Hollmann (dpa)
Ciudad de México, 28 de octubre de 2019 (dpa).-Sebastian Vettel seguro que podría haberse ahorrado la foto que se hizo el domingo en el podio del Gran Premio de México de Fórmula 1 con Lewis Hamilton, tras quedar segundo y poner el título en bandeja al británico, que pronto se coronará por sexta vez campeón del mundo.
La foto del podio en México, forzada por una mascota, evidenció una vez más el fracaso del equipo Ferrari en su ataque al dominio de Mercedes y de su campeón en la Fórmula 1.
“Depende de nosotros hacer un trabajo mejor, pero es más fácil decirlo que hacerlo”, declaró Vettel secamente después de su segundo puesto.
El ganador, Hamilton, y su equipo volvieron a demostrar a Ferrari lo que todavía le falta a la Scuderia para regresar a lo más alto de la Fórmula 1.
El británico disfrutó de unos momentos de felicidad. “Este sentimiento nunca desaparece.” Dijo Hamilton tras su victoria número 83 en la categoría reina del automovilismo.
Si solo queda octavo el próximo domingo en Austin, en el Gran Premio de Estados Unidos tendrá suficiente para obtener su sexto título de campeón del mundo.
La atrevida estrategia en cuanto a la elección de neumáticos de Mercedes en el Autódromo Hermanos Rodríguez fue un éxito. Cualquiera que viera esta táctica no debería tener dudas de que Hamilton está en condiciones de igualar el récord del siete veces campeón del mundo Michael Schumacher la próxima temporada.
En México, Vettel sintió de nuevo lo difícil que es conseguir superar a los bólidos plateados. “Tenemos que conseguir que todo encaje. Mercedes está demostrando durante las últimas temporadas lo que es posible, ellos marcan el camino a seguir”, dijo el alemán.
Con un esfuerzo enorme, Ferrari se puso al día desde las vacaciones de verano (boreal), pero todavía le falta un “algo” con demasiada frecuencia.
En México hubo valentía para asumir riesgos en la estrategia. Por primera vez, Ferrari no se vio afectado por la velocidad de las flechas plateadas, que en los entrenamientos fueron inferiores.
A pesar de los daños en los bajos sufridos por Hamilton al principio de la carrera, este fue capaz de mantener a Vettel a distancia sin cambiar de neumáticos. “La combinación de talento y experiencia es lo que permite ver estas grandes carreras”, dijo Toto Wolff, jefe del equipo Mercedes.
La décima victoria de Hamilton de la temporada fue también la tercera victoria consecutiva de Mercedes, a pesar de que en ellas fue un Ferrari el que salió desde la pole position.
Un motor más potente y la velocidad en una vuelta en solitario son suficientes para que el equipo Vettel gane unas cuantas pruebas, pero no la temporada.
La Scuderia no demuestra estar preparada para el título este año ni mostrando su máximo nivel. Los conductores cometen demasiados errores, los estrategas se ven a menudo sobrepasados, los técnicos se equivocan demasiadas veces. Todavía hay mucho que mejorar para 2020.
Antes de partir hacia Texas, un optimista Vettel dejó un mensaje de motivación para la Scuderia. “No tenemos que escondernos, podemos estar orgullosos de poder presionarlos”, subrayó el piloto de 32 años, mientras en el exterior de la tienda de Ferrari descargaba una fuerte tormenta.
Vettel no querrá acabar así el año que viene, pero, ¿cómo lo continuarán haciendo Hamilton y Mercedes a largo plazo? “Normalmente me pagan por este tipo de respuestas, así que no diré exactamente cómo se hace”, comentó Hamilton.
Pero el campeón del mundo, con cinco títulos consecutivos, se muestra dispuesto a afrontar otro duelo por el campeonato con Vettel. “Te quedarás un tiempo, ¿no?”, le susurró Hamilton al alemán, quien respondió con un asentimiento de cabeza. “Eso está bien”, dijo el británico.
