Pocas palabras en este mundo resultan tan atractivas como “GRATIS”. En el mundo virtual, dónde abundan los appdictos, este vocablo es el botón para disfrutar de una red social, antivirus, juegos, fondos de pantallas, en fin, acceso total a la diversión y además sin costarnos un peso.

Sin embargo, primero tenemos que decir ACEPTO a los términos y condiciones que, seamos sinceros, nunca leemos y en algunos casos, permitir el acceso a nuestro perfil, agenda, directorio telefónico, ubicación, perfil… Abrimos la puerta de nuestra vida y regalamos nuestros datos sin ningún empacho; estos datos, que definen nuestros gustos y preferencias de búsqueda que luego son vendidos a las empresas. ¿Verdad que ya no es tan “gratis”?

Voy a poner un ejemplo muy sencillo: entras a Google, el buscador por excelencia, tecleas “vuelos baratos a Madrid” y se despliegan algunas páginas como despegar.com o tripadvisor.es, al día siguiente entras a tu Facebook y en los anuncios laterales se muestran menciones de hoteles en España, paquetes a Madrid, ofertas en Europa, etc. Lo mismo pasa con Gmail y el contenido de tus correos.

No se trata de entrar a la paranoia, sin embargo, es importante cuidar lo que compartimos en internet, ya que nuestra información se vuelve pública y una máxima geek reza que “cuando algo sube al ciberespacio nunca desaparece” Y si en este momento estás pensando “No importa, yo no tengo nada que esconder, no soy una persona adinerada ni fraguo una revolución” puede que sea cierto, pero tu privacidad es tuya, de nadie más, es un derecho que te pertenece.

Quiero aclarar que no se trata de hackers que estén tras de ti listos para robar los 48 pesos que quedaron en tu tarjeta de débito, ni que anhelen tus contraseñas, más bien, piensa en los sitios de redes sociales y cuánta información personal has publicado allí. Debes pensar en cómo avisas a  un ladrón que tu casa está sola porque estás de vacaciones o a cuál escuela primaria asististe o el nombre de tu mascota (dos preguntas de seguridad utilizadas comúnmente).

La privacidad y seguridad es un asunto muy serio, las fotos que subes hoy y te parecen graciosas, tal vez en 3 años (o en la próxima campaña política) dejen de serlo y desde el momento que las subiste ya no te pertenecen, andarán por ahí avergonzándote y serán un recordatorio permanente de que olvidaste darle clic en esa pestaña que dice “Configuración de la privacidad”

POSTDATA

Si haces operaciones bancarias o compras en línea, puedes estar tranquilo, los sitios son muy seguros, los bancos hacen grandes inversiones para proteger sus datos. Sin embargo, nada es completamente infranqueable y es aconsejable tener contraseñas seguras y variadas.