Productores esperan que este ciclo de leche alta dure hasta semana santa.

Texto y foto por Salvador Y. Maldonado

GUADALAJARA, JALISCO. 2 Enero 2017.-  El aumento del precio internacional de la leche y el hecho de que el dólar siga caro han propiciado un ciclo de respiro para los ganaderos lecheros.

De mayo pasada a la fecha, la tonelada de leche en el mercado internacional subió 900 dólares, según datos de las subastas manejadas por el Global Dairy Trade.

Esta situación ha originado que bajen las importaciones de leche deshidratada y que grandes empresas compradoras, como Nestlé y Kraft paguen buenos precios, incluso por arriba de lo que paga LICONSA.

Al respecto, el director del Consejo para el Fomento de la Calidad de la Leche y sus Derivados (COFOCALEC), Sergio Soltero Gardea, refirió que en los factores que subieron el precio internacional de la leche fue el ajuste a la baja de la producción en la Unión Europea, Nueva Zelanda y Australia.

No obstante lo anterior enfatizó que la pregunta que nos tenemos que hacer es: ¿Cuánto tiempo va a durar esta tendencia en el incremento de los precios de la leche?

Hay quien opina que será hasta semana santa y que después de este periodo los precios nacionales se desplomarán nuevamente. Algo que podría influir en esto es que LICONSA, que es un referente en el mercado nacional, nuevamente le aprobaron presupuesto para adquirir sólo 600 millones de litros de leche en el 2017, lo que contrastará con el 2016 que adquirió 700 millones, o con el 2015 en el que adquirió 864 millones de litros. Si LICONSA no cuenta con los recursos necesarios para comprar cuando menos 770 millones de litros, mandará un mensaje de incertidumbre que afectará el mercado nacional de leche, provocando una situación similar a la ocurrida a principios del 2015 y principios de 2016.

Por otro lado, en el ámbito internacional, también se especula que el comportamiento a la alza de los precios de la leche en polvo cambie, en el momento en que la Unión Europea, EUA y Nueva Zelanda saquen los inventarios que se generaron este año y que rebasan, de acuerdo con datos de USDEC, más de 400 mil toneladas de leche en polvo.

Por su parte, el presidente de la cooperativa PROLEA de Acatic, Ramiro Ramírez González, adujo que el incremento del precio de la leche no ha traído una respuesta generalizada, como  para que todos los grandes compradores aumenten el precio al ganadero, además de que éste ha sido perjudicado por el disparo de precios en diversos insumos ligado al dólar y ahora por el efecto del alza de los combustibles.

La empresa deshidratadora de leche   Mulácteos de Tepatitlán ya está en operación con el sello Tipo Inspección Federal (TIF), lo que marca una nueva etapa para el sector lechero jalisciense, según lo expresó el director de Programas Regionales de la Secretaría de Desarrollo Rural de Jalisco (SEDER), Jesús Tejeda Palos.

El funcionario estatal detalló que el funcionamiento de esta agroindustria se cumplió el objetivo de tener alternativas ante los ciclos de excedentes de leche que tienen problemas de colocación en el mercado regional.

Por su parte, el directivo de Mulácteos Óscar Eduardo Martín Gutiérrez, comunicó que esta secadora está abierta a la recepción de leche para su deshidratación para destinarla a los programas sociales de Liconsa, según convenio al respecto; además de operar también como negocio privado, como de hecho ya lo inició al contar con los beneficios de la certificación TIF.

Tejeda Palos recordó que esta planta de secado tuvo una aportación del erario federal de 6 millones de  pesos para su conclusión, y “que el Gobierno de Jalisco, a través de la SEDER, funcionó como instancia ejecutora. Es decir recibió el recurso, supervisó, verificó la programación, ejecución y el desarrollo del mismo. La conclusión de la deshidratadora d elche de la empresa Mulácteos beneficiará  a tres mil produtores de la región de los Altos de Jalisco. Jalisco es líder en la producción del leche del país”.

Por su parte, el empresario de Mulácteos, refirió que si bien actualmente no hay sobreoferta de leche, pero en caso de que existan “todos los excedentes Liconsa se los va a llevar. Si en dado el caso no se los llevara, la planta absorbería esos excedentes. Deshidrataríamos el producto y lo almacenaríamos en esa planta. Sería como un lote de carros que cuando se ocupe el vehículo, sale, se hidrata y se vuelve a colocar en lo que sería su mercado natural”.

También detalló que esta deshidratadora ya cuenta con más de 50 clientes particulares, sobre todo del mercado de la panificación y otros giros alimenticios, a los que se les  vende leche y sus derivados bajo estos estrictos parámetros de calidad.

EL DATO

Jalisco aporta casi 20 por ciento de la producción de leche fluida del país que supone 11 mil 300 millones de litros al año. La producción  estatal fluctúa entre 5.8 y 6 millones litros diarios.

Hay 17 mil productores lecheros en el campo jalisciense.

Los principales productores lecheros son En carnación de Díaz, Tepatitlán, Lagos de Moreno, San Juan de los Lagos, entre otros.

Desde noviembre pasado Mulácteos obtuvo el sello TIF del Servicio Nacional de Sanidad e Inocuidad Alimentaria (SENASICA).