DIA DE LA TIERRA Y MARCHA POR LA CIENCIA

BIOECONOMUNDO, por Rodrigo Diez de Sollano Twitter: @DeSollano

DÍA DE LA TIERRA
Mientras el mundo dedica miles de billones de dólares al desarrollo, la construcción y la compra de armas, simultáneamente la calidad de vida de los seres humanos va decreciendo por la contaminación del medio ambiente, la destrucción y los sufrimientos que generan las diversas guerras declaradas y no-declaradas en muchos lugares de la Tierra, incluyendo México.

Tal parece que los seres humanos estamos decididos a acabar con nuestro planeta y peor aún, hay gobernantes de países poderosos (Trump entre ellos) que se atreven a negar la realidad del cambio climático que estamos provocando, diciendo que es “un invento de los chinos” o de los científicos.

Pero más allá de la retórica política, o mejor dicho, más cercanas a nosotros, están las acciones que realizamos todos los días cada uno de los habitantes de la Tierra, que se suman a la destrucción causada por las armas pero que su cambio está al alcance de cada persona.

El Día de la Tierra que se conmemora cada año el 22 de abril, no es solamente un llamado a los gobernantes (que desde luego lo es) sino también es una invitación a cada ser humano para hacerse consciente del impacto de nuestras acciones y a realizar un esfuerzo concreto para cambiar hábitos y comportamientos que están dañando nuestro hogar común que es el planeta Tierra.

Por ejemplo:

La utilización de bolsas de plástico que está convirtiendo los océanos en basureros globales y está dañando la vida marina. Podemos cambiar los hábitos de compra llevando a la tienda o al supermercado una bolsa reutilizable en lugar de pedir bolsas de plástico que desechamos una vez que llegamos a la casa. Los comerciantes podrían impulsar estas acciones, ofreciendo un pequeño premio o descuento a los clientes que lleven sus bolsas.

Otra de las fuentes de contaminación son los envases desechables, desde las botellas de agua o de refrescos hasta los recipientes para la comida “para llevar”. Aquí hay varias alternativas, desde el uso de envases reutilizables, hasta el cambio de materiales de los envases utilizando materiales reciclables en lugar de poliestireno. En las oficinas se puede promover el uso de vasos desechables de papel o cartón encerado y/o de tazas y vasos de cerámica o vidrio.

El transporte automotor es una de las fuentes de contaminación más importantes. Podríamos reducir su uso caminando en distancias cortas o andando en bicicleta en distancias medianas o utilizando el transporte público en largas distancias, para sustituir los vehículos privados y al mismo tiempo debemos exigir a las autoridades el mejoramiento de la red de transporte público y de la infraestructura urbana que lo favorezca, en lugar de construir más infraestructura para los autos privados. El uso de vehículos eléctricos en lugar de gasolina o diesel, debe favorecerse con leyes específicas que impulsen a los fabricantes y a los compradores de estos automóviles, especialmente si pueden utilizar energía solar para la carga de las baterías.

El diseño de casas y edificios que utilicen iluminación y ventilación natural en lugar de aire acondicionado y luz eléctrica, debe ser promovido por medio de leyes federales y estatales así como de reglamentos municipales que estimulen el uso de energías renovables para ir sustituyendo las fuentes no-renovables tales como petróleo, gas natural o carbón. Es necesario establecer metas concretas con fechas para lograrlas.

Es indispensable separar, reciclar y reutilizar la basura en lugar de crear tiraderos municipales que provocan contaminación del aire y del agua, además de enfermedades trasmitidas por roedores e insectos. Esta separación debe iniciar en cada hogar teniendo basureros distintos para vidrio, metal, papel y cartón, plástico, desechos orgánicos y otro para basura higiénica. Parecería a primera vista muy complicado tener varios depósitos de basura en casa, pero una vez que nos acostumbramos a depositar cada tipo de basura en su propio recipiente, se convierte en una costumbre favorable para cada familia puesto que incluso así es vendible la basura. Esto debe coordinarse con el servicio público de limpieza para asegurarnos que TOD@S cumplamos con las normas para la disposición de la basura, empezando por las autoridades municipales.

Para completar esta lista de acciones propuestas, no sólo para el Día de la Tierra sino para todos los días, agrego la siembra de árboles. Podemos ponernos como meta sembrar y cuidar un árbol por mes. Imaginen si esto lo hiciéramos todos los habitantes del planeta…!

Aquí hago un paréntesis para invitar a l@s lectoras(es) a que aporten sus ideas y las comportan todos los días con su familia y sus vecinos.

MARCHA POR LA CIENCIA
En este punto entra en juego la Marcha por la Ciencia realizada también el 22 de abril, la cual fue promovida por científicos a nivel mundial con manifestaciones públicas en más de 500 ciudades del planeta para promover la inversión pública y privada en la investigación científica. La UNESCO (1) señala que en México la inversión gubernamental pasó de 0.2% del PIB en 2005 a 0.38% en 2013, mientras que la inversión privada disminuyó quedando la inversión total todavía muy lejos de la meta de llegar a invertir el 1% del PIB. Mientras que las patentes mexicanas en los últimos 5 años pasaron de 90 a 217, que representan apenas el 0.1% de las solicitudes de patentes a nivel mundial.

Lo anterior es en parte resultado de la forma en que se imparten los estudios superiores, no solamente las licenciaturas, pero principalmente los postgrados. La idea es generar un egresado capaz de investigar pero sin espíritu emprendedor, lo cual hace que el trabajo quede concluido con un documento (tesis) de maestría o doctorado, el que puede ser publicado en revistas especializadas y luego es archivado en las bibliotecas, sin hacer un esfuerzo para que los conocimientos generados se conviertan en patentes que puedan ser explotadas por sus propios autores intelectuales o franquiciada por otras personas o empresas.

El instrumento ideal para lograr lo anterior es la creación de “parques científicos y tecnológicos” (PCyT) que son instituciones que facilitan que la investigación científica se convierta en bienes o servicios que generen bienestar para la población y para los propios investigadores.

El pero… es que para lograr lo anterior se requieren recursos (por ahora muy escasos) que canalizados a través de las instituciones adecuadas (por ejemplo el CONACYT) podrían detonar la creación de muchos PCyT.

Sería muy positivo para el país que al recuperar los recursos robados por políticos corruptos, ahora detenidos, se dedicaran a la creación de PCyT siguiendo el tema que utilizaron los manifestantes este 22 de abril en la Marcha por la Ciencia 2017: “Menos corrupción y más investigación”…

Fuentes de Información

1. ONU-UNESCO-Informe sobre Ciencia hacia 2030- (2016)