La Huacana, Michoacán. 28 de mayo de 2019.- El día de ayer, soldados del Ejército Mexicano al efectuar un recorrido cerca de la comunidad de Cuimbo, en La Huacana, Michoacán, en dos ocasiones fueron objeto de disparos de armas de fuego por civiles armados; asegurando cuatro armas largas, cargadores y cartuchos.

Posteriormente, al reincorporarse el personal militar a su unidad y al pasar por el centro de la cabecera municipal de La Huacana, Mich., la población, incluyendo mujeres y niños, bloqueó el paso, agrediéndolos física y verbalmente, reteniendo a un grupo de 11 militares, mientras les exigían también la devolución del armamento que se había asegurado.

Ante esta situación y con la finalidad de no provocar una desgracia – como la que habría ocurrido si hubieran hecho uso de sus armas- los soldados entregaron su armamento.

En este escenario, se tenía la opción de que ingresara un mayor número de efectivos militares para rescatar a sus compañeros; sin embargo, se optó por devolver el armamento que se les había asegurado, con el fin de evitar dañar a la población civil y preservar la vida de los soldados.

Enviar a mujeres y niños para confrontar o evitar la presencia de las autoridades en las áreas de influencia y restringir la acción de la justicia, es un procedimiento común de las Autodefensas y de los grupos delictivos (“LOS VIAGRAS” y “CJNG”) de esa región.

Éste es otro hecho de los muchos antecedentes que existen en diversas regiones del país, donde se emplean a los grupos vulnerables (mujeres, niños y ancianos), como escudo humano; en el caso específico de Michoacán a partir del 2013, las llamadas Autodefensas tuvieron una gran influencia, en las que se autorizó que registraran armamento de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.

Michoacán no es la única entidad en que sus pobladores agreden a la autoridad; dentro del tema del huachicoleo, también han sido numerosos los eventos en los Estados de México, Hidalgo y Puebla.