Por Hugo Aceves Alejandre*

Uno de los causantes de mi gusto por el fútbol soccer es Johan Cruyff, fue el mundial de 1974 el que despertó mi pasión, la naranja mecánica me hipnotizo y su líder era Cruyff. Paciente, elegante, inteligente, siempre intentaba nuevas jugadas. El mejor cambio de ritmo no lo invento un brasileño, fue Cruyff.

El mejor Europeo de todos los tiempos, es un referente para Holanda, trasciende como jugador y como entrenador, decía que el enseñaba fútbol, no entrenaba, entrenadores hay muchos, enseñadores son contados.

Creo que fue fue su talento y su influencia lo que más aporto al fútbol, el ahora entrenador de Bayern Munich, Pep Guardiola, que sabe algo de fútbol, dice que en los últimos 25 años (y quizás más), no hay nadie que haya aportado más al soccer que Cruyff.

Creador de academias de fútbol, polémico como pocos, siempre iba en contra de lo establecido, y gritaba que el fútbol si es un espectáculo y que prefería ganar 5 a 4 que 1 a 0.

El talento lo obtuvo de sus genes, pero el hambre de ganar, seguramente fue de su situación precaria, perdió a su padre a los 12 años y su madre entro a trabajar, limpiando los vestuarios del Ajax, en donde más tarde llego a ser su máximo ídolo.

Cruyff es ya un inmortal, que sacó al jugador de ser un miembro pasivo (los clubes negociaban las regalías de la publicidad), a ser un protagonista del marketing deportivo, en el mundial del 74, no vistió la camiseta de Holanda de Adidas, que patrocinaba a esa selección, jugo con el jersey de Puma, que era su patrocinador.

Johan Cruyff era un grande y creo que lo seguirá siendo, filósofo, jugador y enseñador que desde cualquier tribuna contribuyo a hacer del fútbol un deporte mejor. Viva el flaco, mi mentor en el fútbol.

*Hugo Aceves Alejandre: Apasionado aficionado futbolero y exfutbolista amateur. Cruzazulino de hueso azulado y sangre azul. El resto del tiempo es Ingeniero Industrial y de Sistemas con un MBA.