• Rusia, lista para degustar la carne mexicana
  • Por Carlos Trejo Serrano

Ciudad de México, 26 de agosto de 2018 (Notimex).- Pese a que Estados Unidos cuenta con mayores ventajas competitivas y todavía se depende de ese país para cubrir parte de la demanda interna, la producción mexicana de carne de cerdo se mantiene en continuo fortalecimiento y podría crecer hasta 30 por ciento durante los próximos años.

“De aquí al 2022, el sector porcícola va a crecer entre 25 y 30 por ciento”, expuso el coordinador general de Ganadería de la Secretaría de Agricultura, Francisco Gurría Treviño.

Señaló que en la actualidad se tiene una producción nacional de 1.7 millones de toneladas y, de mantener ese ritmo de crecimiento, alcanzará al menos dos millones de toneladas en 2022.

De acuerdo con el Atlas Agroalimentario 2012-2018, elaborado por el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), la porcicultura mexicana creció 16.4 por ciento desde que inició la presente administración y hasta el año pasado.

Jalisco sumó 301 mil 148 toneladas del cárnico, lo que le dejó ingresos hasta por 14 mil 580 millones de pesos durante 2017 y se colocó como el principal productor a nivel nacional.

En tanto que Sonora reportó 261 mil 757 toneladas; Puebla 165 mil 563 toneladas, y Yucatán 138 mil 917 toneladas, con lo que se ubicaron en el segundo, tercer y cuarto lugar de la producción del país.

Sólo en 2016 se logró una producción nacional de un millón 376 mil 199 toneladas, cantidad suficiente para preparar “carnitas” y sentar a la mesa dos veces a la población de China e India en conjunto.

El funcionario de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) aseguró que el avance firme y constante de la porcicultura se debe a la apuesta del sector privado, pues éste ha invertido poco más de mil millones de dólares en fechas pasadas para granjas, rastros y plantas procesadoras de Jalisco, Sonora, Puebla, Yucatán, Guanajuato y Chiapas, por ejemplo.

Para el presidente de la Organización de Porcicultores del País (Oporpa), Heriberto Hernández Cárdenas, los criadores de cerdo han hecho bastante bien la tarea de atender el mercado nacional y, de esta manera, reducir el déficit de 45 por ciento de esta proteína.

Señaló que los productores también han trabajado en cumplir los exigentes estándares de calidad, sanidad e inocuidad para catapultar la industria del cerdo a ámbitos internacionales y salir de la crisis productiva y comercial que se vivía en años pasados.

“La industria es fuerte (…) y en los próximos años viene una consolidación”, expuso el dirigente, quien dijo que el sector ve coincidencias con las políticas anunciadas por el gobierno entrante, como lo es el alcanzar una autosuficiencia alimentaria.

“Lo vemos con mucha simpatía, porque necesitamos fortalecer y abastacer el mercado mexicano, sin dejar de seguir explorando los mercados del exterior”, comentó en entrevista por separado.

Planes hacia el exterior

En 2017 se importaron más de 800 mil toneladas de carne de cerdo, la mayor compra llegó de Canadá y Estados Unidos, y sólo se enviaron 127 mil 695 toneladas hacia el exterior.

Japón y Corea son los principales países a los que se destina la mayor parte de las exportaciones, dijo el coordinador general de Ganadería de la Sagarpa, Francisco Gurría Treviño,

Entre 2012 y 2017 se pasó de adquirir el cárnico de cinco a seis naciones y aumentó la venta de nueve a 11 países, según el Atlas Agroalimentario 2012-2018, pero se avizoran más oportunidades para las exportaciones de cerdo mexicano a los mercados alternos de Asia y Europa, con la renegociación de los acuerdo comerciales.

Hernández Cárdenas refirió que ello también se debe a la decisión de Estados Unidos para reconocer a México como país libre de Fiebre Porcina Clásica, lo que le abre más puertas para llegar a ese país y otros más.

“Esto no sólo va a acelerar la demanda de cortes de mayor valor, sino posicionará a México como un proveedor confiable en ese tipo de productos”, acentuó.

El sector se ha “comportado de una manera muy valiente” y ha sabido enfrentar la competencia, sobre todo del vecino país del norte que manda el excedente de las piezas de menor aprecio y valor para ser usadas en la elaboración de embutidos, coincidió Gurría Treviño.

Se estima que el gobierno estadounidense exportó ocho mil toneladas de pierna de cerdo en 1995, cuando inició la relación comercial de ese producto, y el año pasado se mandaron 803 mil toneladas, lo que significó un incremento de casi tres mil por ciento.

Pero después de que México impuso aranceles de 20 por ciento a la pierna y paleta de cerdo procedente de aquel país, aseveró que se ha notado una disminución de entre 8.0 y 10 por ciento de las importanciones “y hoy todavía hay cautela por saber si será una condición permanente”.

México regresará a Rusia

En la negociación para exportar carne de cerdo a Rusia se tienen avances importantes y antes de concluir 2018 se podría volver a reactivar el intercambio comercial, aseguró el funcionario de la Sagarpa.

Con ello se tendría la oportunidad de exportar de 30 mil a 40 mil toneladas del cárnico cada año y en un mediano plazo, apuntó Gurría Treviño, quien al mismo tiempo confió en que el gobierno ruso tenga pronto una resolución favorable sobre los estándares de sanidad e inocuidad de México.

En Rusia se incrementó 23.5 por ciento el consumo per cápita de carne de cerdo y sería una “área de oportunidad para no tener los huevos en la misma canasta, como ocurre con Japón”, agregó el presidente de Oporpa.