- Los Morales Álvarez se definen como una familia “muegano” y “bipolar” que ha sabido sortear todo.
La Piedad, Michoacán 19 abril 2017.- Cuando BRUNOTICIAS platicó con ellos era la pretemporada de 2016. Este 19 de abril de 2017 se puede hacer realidad el sueño de Carlos Adrián Morales Higuera. Retirarse en el Morelia, el equipo de sus amores siendo campeón.
Un jugador que ha llorado por vergüenza deportiva, pero que no pudo acompañar a su hija para graduarse de la prepa. Gajes de la profesión del futbolista que no se ven en la pantalla Una familia que ha recorrido cientos, miles de kilómetros es la que sostiene a este veterano jugador.
La historia de Carlos y Mariana empezó en el futbol pero va más allá. El chico precoz de secundaria que cortejó a la preparatoriana en la Noche Colonial del Colegio Vasco de Quiroga. Los cuatro suspiran y exclaman con cariño cuando escuchan el nombre de La Piedad. Las andanzas del futbol, las mudanzas, los cambios de ciudad, están próximos a terminar.
Carlos Morales juega contra las Chivas lo que probablemente sea su última final. Lo hace a su manera, con una disciplina férrea, tomando mucho café y siendo la familia su soporte. Pero un dato muy importante en ello, un jugador que nunca se lesionó en una carrera de más de dos décadas en el balompié.
Morelia es su casa y seguirá siéndolo desde 1998 en su debut en la primera división. Recuerdan como llegaron por primera vez a la capital michoacana con mucha nostalgia. Sobre todo por la ausencia del papá de Mariana. Pero más remembran su regreso. La noticia les llegó como si estuvieran en Disneylandia, por que literalmente así fue.
Son los vástagos de la familia quienes responden a la pregunta. Estaban en el juego de Piratas del Caribe en Orlando cuando llegó la llamada. Regresaban a Morelia después de haber estado en Santos en Estudiantes Tecos, en Toluca, en Tigres y en Pachuca.
Carlos coincide con Mariana en que el dinero nunca fue lo importante o lo prioritario. Pero han obtenido mucho más de lo que se imaginaron en esta profesión. Morales Higuera ya tiene su título de entrenador. Ha sido 6 veces campeón y otras 6 veces subcampeón de diferentes torneos, pero sobre todo de la vida.
Este clan de cuatro los ves juntos como “muéganos”, así lo dice la propia Mariana quien narra momentos difíciles en lo deportivo y en la vida. En lo deportivo aquel penal fallado con Santos Laguna. Estuvo al borde del retiro dice. Pero igual con una complicación de salud de tuvo el más pequeño de casa cuando padeció literalmente cientos de alergias.
Monarcas está más cerca del descenso que de ser campeón de liga. Sin embargo esta noche del 19 de abril está la esperanza de ser campeón. Una esperanza que también conlleva el retiro. Pero esto, en caso de que suceda, se alivianará
