- Chinos ya producen diseños wirrárikas en productos artesanales.
- Ven difícil una denominación de origen para la chaquita.
Texto y Fotos por Salvador Y. Maldonado
Guadalajara, Jalisco, 26 julio 2016.- Hay un propósito de establecer una marca comercial para la artesanía de la chaquira wirrárika (huichol). Pero se tienen obstáculos que superar, como el hecho de que este material se importe de la República Checa, por lo que se analiza a fondo esta situación peculiar.
El asunto reviste urgencia, dado que se conoce que en China ya se hace producción artesanal con chaquira que también utiliza las imágenes de los diseños wirraritari (plural del término wirrárika).
Así lo informó el director del Instituto de la Artesanía Jalisciense (IAJ), Camilo Ramírez Murguía, quien refirió que para contrarrestar la dependencia externa de la chaquira se ha iniciado un estudio para establecer en Jalisco una fábrica de este material.
Insistió en que fue toda una “desagradable sorpresa saber que la chaquira se trae de Europa. El reto es eliminar esta dependencia y concretar la fábrica. Se pretende establecerla en un punto de la zona metropolitana, como pudiera ser la parte de Zapopan de la salida a Colotlán, punto que está junto a la carretera que lleva a la zona wirrárika en la Región Norte de Jalisco. Tres expertos en vidrio investigan el tema para dar con un material doméstico que sustituya al importado”.
Oficio de gran impacto económico
Las artesanía wirrárika, tanto en chaquira como en material textil, son de gran importancia para las comunidades de este grupo étnico del Norte de Jalisco. Camilo Ramírez destacó la aportación del trabajo femenino en las artesanías de este grupo étnico, tanto en el medio rural, como en el urbano. .
Detalló que ya con el control de la materia prima se puede con mayor facilidad hacer el procedimiento necesario de buscar una marca u otra figura jurídica (como una denominación de origen) para la protección de la identidad de un producto artesanal emblemático de Jalisco.
El funcionario estatal explicó que ya se cuenta con un fondo inicial de diez millones de pesos para el establecimiento de la fábrica de chaquira, por lo que actualmente se trabaja en la elaboración de una materia prima de calidad para terminar con la dependencia de la chaquira importada.
Para destacar la importancia económica de la chaquira, indicó que ya se tienen identificados a 25 mil artesanos wirraritari que elaboran en forma permanente productos artesanales con este insumo, y que radican en comunidades de los municipios de Huejuquilla El Alto, Mezquitic, Bolaños y en la zona conurbada tapatía.
Citó que este dato se tiene recabado en un trabajo en marcha de actualización del padrón estatal de artesanos.
Capacitación y promoción
Ramírez Murguía informó también que se tiene en marcha un programa de capacitación en diseño de la artesanía wirrárika. Apuntó que un punto clave es tomar en cuenta las aportaciones de artesanos de esta etnia que han logrado el éxito artístico y comercial con su trabajo.
Trajo a colación que entre los artesanos wirratari de gran prestigio, figura Francisco Bautista, quien es el autor del diseño del llamado vochol, un automóvil Volkswagen sedan recubierto de chaquira.
Otros puntos de promoción son el establecimiento de atractivos turísticos en municipios con población wirrárika. Indicó que se colocará una escultura de un venado de chaquira de siete metros de altura a la entrada de Bolaños; y una figura de un maracame (médico tradicional de esta etnia) de cinco metros a la entrada de Huejuquilla El Alto.
También habló de que se tiene en planes el uso de la Casa del Gringo en Bolaños (una población de gran valor histórico en esta población), como una galería de artesanía wirrárika, luego de un acuerdo con una empresa minera para que ceda la finca en comodato.
PARA SABER
El llamado vochol VW ornamentado con chaquira fue elaborado en 2010 y ha sido apreciado en diversos museos de nuestro país y del extranjero.
Fue patrocinado por entidades públicas y del sector privado.
Supuso 4mil 760 horas de trabajo y la colocación de 2.2 millones de cuentas de chaquira que pesaron 90 kilogramos, además de 16 kilogramos de resina.