Sector Primario, por Francisco Mayorga Campos
Hoy en día existen por fortuna muchos instrumentos para la mitigación de riesgo cuando se trata de invertir al emprendedor.
De hecho el ser emprendedor se ha convertido en un tema de moda en casi todos los niveles de México, siendo esto lógico y resultado del futuro gris de las pensiones y la creación de empleos ambos temas en los que las llevan de perder son las generaciones más jóvenes.
No obstante los avances, todavía falta mucho esfuerzo y estructura de parte de la cuádruple hélice: gobierno, empresas, Organismos de la Sociedad Civil (OSC) y academia para verdaderamente apoyar e impulsar al emprendedor en todas sus etapas y sectores. En especial yo me enfocaría al campo pues es de los sectores que tienen un mayor efecto multiplicador en la economía, mayor retorno.
Ahora bien. Que implica este esfuerzo y estructura necesarios. A mi modo de ver tiene que ver con 2 cosas. Capital financiero y capital intelectual.
El capital financiero tiene que ver con alinear los incentivos para que los inversionistas estén dispuestas a invertirle a los emprendedores, especialmente en las primeras fases de su idea en donde hay más riesgo y en donde es muy difícil encontrar créditos formales. Ya el INADEM ha intentado hacer eso pero todavía le falta mucho.
Hay que recordar que una buena inversión en una empresa exitosa puede dar rendimientos muy altos y pagar muchos errores en inversiones anteriores.
El segundo punto tiene que ver con el acompañamiento, es decir todo el apoyo moral que necesita un emprendedor para conocer a profundidad su idea y el entorno y mitigar el riesgo de que su idea fracase. Las incubadoras y las universidades, con sus redes de mentores juegan un papel fundamental aquí. No obstante tampoco no son suficientes, faltan sumarse más empresarios y ayudar a los que van empezando.
Por otro lado, todavía hay una fobia generalizada al invertir en empresas “disruptivas”, en prestar dinero a los jóvenes de jeans o a los que les gusta programar más que estar en oficinas.
Si queremos realmente comenzar a innovar y a generar tecnología tendremos que empezar a crear ese entorno común en donde los emprendedores se sientan con ánimo y confianza de compartir y lanzar sus ideas para convertirlas en productos exitosos en el corto plazo, y más aún en más y mejores alimentos para la población. Enhorabuena, el impulso ya lo traen los jóvenes en su interior, seamos todos protagonistas de esta nueva etapa del campo mexicano.
Francisco Mayorga Campos Estudió Finanzas en el Tec de Monterrey, encabezó el área juvenil del Consejo Agropecuario de Jalisco, dirige Agronegocios Nueva Galicia, es criador de pollos orgánicos y agricultor de medio tiempo en El Chante Alimentos.
